Trabajo: Articulo Cientifico
Nombre: Luiggy Contreras Chang.
TÍTULO: UN NUEVO REGISTRO: EL ESPAÑOL EN
INTERNET. PRESENTE Y FUTURO.
TITLE: A NEW REGISTER: SPANISH IN INTERNET. PRESENT
AND FUTURE
AUTOR: ALEJANDRO SALGADO MARTÍNEZ
CENTRO: I.E.S. VÍA VERDE
CORREO ELECTRÓNICO: alejandrosalgado@andaluciajunta.es
RESUMEN
La tremenda difusión que ha adquirido Internet en unos pocos años ha afectado a
prácticamente todos los órdenes de nuestra sociedad: el ocio, las comunicaciones, el mercado.
El lenguaje no se ha escapado a esta arrolladora influencia y en los últimos tiempos se abre paso
en la red un tipo de texto a medio camino entre la escritura y la oralidad conversacional: el chat,
el correo electrónico y ahora también los mensajes a través de la telefonía móvil con acceso
también a Internet dan fe de un cambio en las formas tradicionales de comunicación que está
revolucionando la escritura con la aparición de nuevos códigos, alteraciones de la ortografía
tradicional y, en general, un mayor aprovechamiento de las posibilidades tipográficas que
confiere a los textos electrónicos o virtuales una personalidad propia diferente.(By:Luigyy Contreras).
PALABRAS CLAVE
Internet – castellano – características – efectos - neologismos – fragmentación – futuro – nuevos
códigos – emoticonos – nettiquetes – claves futuro.
SUMMARY
The tremendous diffusion that Internet has had in a few years has affected to almost all
levels of our society: leisure, communications, market. The language has not got away of this
enormous influence and recently a new type of text is appearing in internet between writing and
oral form: chat, e-mail and now also mobile messages are changing the traditional ways of
comunications with new codes, ortographical changes and, in general, a better use of this new
tipography which confer the texts of a genuine and different personality.(By: Luiggy Contreras).
KEY WORDS
Internet – spanish – characteristics – effects - neologisms – fragment – future – new codes –
smileys – nettiquetes – future keys.
1. Introducción
En el mundo hay unas 5.000 lenguas, pero no todas se escriben, y de las que se escriben no
todas tienen presencia en Internet, donde hay unas 600 lenguas. Por ejemplo, la enciclopedia
colaborativa Wikipedia está disponible en 230. Los buscadores han comenzado por las lenguas
con más navegantes: Google detecta 35 idiomas (aunque permite acceder a páginas escritas en
otros). De las lenguas con alfabeto latino, el inglés es la más presente en la Red (casi con la
mitad de páginas); en orden decreciente le siguen el alemán, el francés y el español. Si el
castellano, la segunda lengua del mundo en importancia, tiene una presencia ridícula en Internet
es porque la lengua de Cervantes no ha afrontado de la forma más adecuada su “adaptación” a
las nuevas tecnologías. En efecto, el español tiene una presencia testimonial en Internet. El
director del Instituto Cervantes, Jon Juaristi declaraba en una entrevista a El Mundo
(15/10/2001) que el español “sigue en una situación de desfase con respecto al inglés, pero su
presencia en la sociedad de la información va aumentando, aunque no al ritmo necesario”.
El español conserva en Internet parte de su carácter de lengua internacional, existen
buscadores específicos en lengua española y versiones en español de algunos buscadores de uso
general. El lingüista José Antonio Millán tiene una peculiar visión de la “presencia” del
español en Internet. “Es necesario distinguir entre la cantidad de páginas escritas en español,
que probablemente está subiendo, y en la calidad de esta producción”. Para Marcos Marín la
batalla debe entablarse a partir de ahora en el aspecto de los «contenidos». «Si lo que queremos
es que el público consulte nuestras páginas tendremos que meter en ellas contenidos de calidad
en español que no se encuentren en otros sitios», señala. Como es sabido, la lengua tiene un
valor de uso y un valor de cambio, ligado este último al prestigio intelectual y social de la
cultura de la cual es portadora: cuanto más valiosa, ponderada, confiable e instrumental —para
propios y ajenos— sea la información en español que circula en Internet, más serán los usuarios
calificados, mayor el impacto de nuestro idioma y más amplia la irradiación prestigiada de
nuestras diversas riquezas culturales. En cambio, es obvio que la situación no es homogénea
para todos los contenidos. Mientras que en el ámbito cultural y en las humanidades van
creciendo poco a poco los contenidos en español, en el capítulo de la ciencia y la tecnología la
lengua dominante es sin duda la inglesa. Esa circunstancia es tan perjudicial para el español
como para otras lenguas de primera fila. Salvo excepciones, puede afirmarse que, en materia
científico-técnica, a medida que un contenido es más especializado o novedoso, menor es la
probabilidad de encontrarlo en versión española.
Como afirma Lucila Pagliai, es evidente —y obvio— que el uso mayoritario de la lengua
que circula en la red es de índole privada: discutir en ese ámbito la calidad, la cobertura y la
pertinencia lingüística sería como haber pretendido reglar el uso del español en las transacciones
comerciales tradicionales, en los folletos de promoción, en los libros, en las conversaciones
telefónicas, en los epistolarios o en cualquier discusión entre amigos o desconocidos. Es decir,
que intervenir en el ámbito de lo público en la cuestión del uso del español en Internet acarrea
los mismos problemas, las mismas vacilaciones y tribulaciones que acarreó hasta el momento
ese tipo de intervención en cualquier otro medio masivo de expresión. Igual que lo ha sido hasta
ahora con otros medios, también con Internet es en el gran abanico de la educación donde la
intervención institucional no sólo es posible, sino necesaria. Esta posibilidad de intervenir
institucionalmente en la cuestión de la lengua a través de la educación conduce a una
problemática central para el uso del español en Internet: el origen, la cantidad y la calidad de los
contenidos que circulan en la Red.
Cada cierto tiempo, también, surgen voces que expresan en términos de sacrificio la
consecución de una presencia adecuada del español en la Red. Comentarios que proclaman una
renuncia a lo más particular del idioma, a la eñe, a las tildes... al sentimentalismo. Para el
profesor Carlos Subirats (“La lengua española y las nuevas tecnologías”, El Mundo,
21/05/1996) “el cambio de soporte de la transmisión de información, es decir, el paso del papel
a la electrónica, ha generado cambios, que recuerdan los que provocó, en su momento, el
descubrimiento de la imprenta: las lenguas que no consiguieron uniformar su ortografía y su
gramática desaparecieron o quedaron relegadas a meras hablas locales; en la actualidad, las
lenguas que no consigan desarrollar medios informáticos que garanticen su posibilidad de ser
manipuladas electrónicamente perderán su importancia económica y política. [...] En este
contexto, la incapacidad de organizar el desarrollo de la investigación y la tecnología necesaria
para impulsar la industrialización del español puede llevar irremisiblemente a una nueva forma
de colonización.”. Tanto Millán como Marcos Marín consideran que se trata de un discurso
trasnochado. “Estas peculiaridades no suponen ningún tipo de problema. Los bancos,
administraciones y entidades que no acentúan o no ponen eñes en sus documentos de Internet es
porque no quieren. Si acaso, el próximo espacio que queda por conquistar es el de las
direcciones de Internet, y la próxima revolución es posible que amplíe el espectro no sólo a los
caracteres españoles, sino también a los de otras muchas lenguas que tienen el mismo problema,
incluido el chino”, señala Millán.
2. Características generales de la lengua en Internet
Los estudios sobre lengua e Internet y/o lengua en Internet a menudo se centran en analizar
cómo modificamos nuestro registro lingüístico en Internet, entendiendo Internet meramente
como tecnología y el registro lingüístico como algo preexistente y hasta cierto punto, estable. La
ecuación resultante, pues, parte de la combinación de dos factores que son tomados de un modo
descontextualizado, como si existieran de un modo aislado y predefinido: de un lado, la lengua
(su código normativo y sus variantes para los registros oral y escrito, etc.) del otro, la tecnología
(las máquinas, los cables, el software, etc.). De este modo, se pueden realizar interpretaciones
que parten de la existencia de dos entidades separadas, objetivas y estáticas y que pueden llegar
a describir una serie de efectos y consecuencias.
1. Sin duda alguna, la eñe es una de las marcas distintivas del español en el mundo. La
transmisión informática de éste y otros caracteres –como las tildes- es posible desde
hace mucho tiempo. No hay, pues, motivo para que, por ejemplo, un correo
electrónico se escriba sin eñes y sin acentos. Según José Antonio Millán, “de
hecho, hay una práctica lamentable que consiste en enviar mensajes despojados de
estos caracteres”, en algunos casos añadiendo notas explicativas de dudosa
justificación. Lo que sí queda lejos aún es la existencia de dominios que incluyan la
eñe o las tildes, dado que todo Internet funciona en codificación de siete bits, es
decir, limitado a 128 caracteres del lenguaje ASCII. En estos casos, los diacríticos,
en general, se representan con dificultad y, en muchas conversiones, desaparecen. En
el mejor de los casos, queda la letra a la que se sobreimponen, es decir, a por á, n por
ñ; en otros, el resultado es imprevisible. Es preciso seguir insistiendo en la necesidad
de que se pueda escribir en español, con toda su riqueza gráfica, desde cualquier
sistema.
2. Aunque menos patente, la dificultad es mayor en lo que se refiere a la ordenación
alfabética. Los programas no suelen reconocer que tras la n va la ñ o que las vocales
acentuadas deben ordenarse en el mismo lugar que las correspondientes
inacentuadas. No hablamos aquí del orden tradicional de ch o ll, razonablemente
3
resuelto hoy. Ni siquiera el diccionario académico en cederrón es capaz de resolver
esa dificultad y, cuando se hacen búsquedas de esquemas, empleando comodines, las
formas con ñ aparecen descolocadas. Hay variantes de sistemas operativos
completos, como el RedHat de Linux, con ese inconveniente, el cual se puede
solucionar con una simple rutina, que, en cualquier caso, hay que construir.
3. La necesidad de suplir la falta de contacto visual ha llevado al desarrollo de un
nuevo sistema de «símbolos de expresión», que completan los signos de puntuación
y que se forman dibujando caras expresivas con éstos [:)], [;)], [:(]. Estos símbolos
no son dependientes de las lenguas, sino universales. Nuestra experiencia, sin
embargo, es que su uso puede deparar algún malentendido.
4. El semicultismo y la ultracorrección se pasean por las frases de los internautas (pero
eso no es diferente de lo que ocurre si examinamos la correspondencia interna de las
empresas, en soportes tradicionales).
5. La presencia de anglicismos crudos es muy abundante, sobre todo en
comunicaciones de informáticos (listas de distribución, por ejemplo).
6. El nivel estilístico dominante es el informal. Hay una notable relajación en las
formalidades sociales y una simplificación de las fórmulas de tratamiento.
7. El uso del subjuntivo se simplifica y tiende a reducirse a las formas simples o sólo al
presente, cuando no desaparece. Esta tendencia está también presente en la lengua de
los escolares, en general.
8. Contra lo que pudiera pensarse —y pese a las limitaciones de nuestro corpus— no se
aprecia una diferencia entre la estructura de las frases —longitud de las oraciones,
por ejemplo— en los mensajes electrónicos y los correspondientes en papel.
9. Los usuarios desarrollan mecanismos de consulta para paliar lo que consideran
lentitud de las instituciones, especialmente las academias. Esta afirmación está
probada en terminología.
10. La conciencia lingüística de los usuarios es elevada, así como su confianza en la
capacidad del español para adaptarse a las necesidades de los tiempos.
3. Referencias Bibliograficas
ÁLVAREZ, Alfredo ; NÚÑEZ, Rafael y DEL TESO, Enrique: Leer en español,
Nobel, Oviedo, 2005.
ARRARTE, Gerardo y SÁNCHEZ DE VILLAPADIERNA, José Ignacio: Internet y
la enseñanza del español, Arco-Libros, Madrid, 2001.
CRYSTAL, David: El lenguaje e Internet, Cambridge University Press, Madrid,
2002.
– FUNREDES, "El primer estudio de las lenguas y la Internet":
http://funredes.org/LC/espanol/L1.html, 1996.
MARCOS MARÍN, Francisco: Los retos del español, Iberoamericana, Madrid,
2006.
MARCOS MARÍN, Francisco: “El español en Internet”, en Nueva Revista, nº 44,
abril-mayo de 1996.
MILLÁN, José Antonio: La lectura y la sociedad del conocimiento, Federación de
Gremios de Editores de España, 2001.
MILLÁN, José Antonio: De redes y saberes: cultura y educación en las nuevas
tecnologías, Santillana, Madrid, 1998.
YUS, Francisco: Ciberpragmática: el uso del lenguaje en Internet, Ariel, Barcelona,
2001.
Trabajo: Articulo Cientifico
Nombre: Luiggy Contreras Chang.
Incidencia de las pantallas del
celular, el videojuego y la tv en la
dinámica de la generación
interactiva venezolana
AUTOR: Mabel Calderín, Xavier Bringué
y Charo Sádaba
RESUMEN
Mediante un Análisis multivariante complejo se analizan las pautas de consumo, uso y
valoración propia de niños y adolescentes en lo concerniente a las pantallas del celular, la
televisión y el videojuego durante el año 2008. Se responden preguntas relacionadas con
la realidad experimentada al respecto por los menores venezolanos. Se analiza la relación
que mantienen con las referidas pantallas los niños y adolescentes de edades
comprendidas entre 6 y 18 años que viven en este país. Se concluye que la televisión es
la pantalla con mayor penetración en los hogares de los niños venezolanos. Vale también
destacar que, cualquier otra actividad que tengan que hacer los adolescentes, la
combinan con la televisión, ésta les acompaña, aunque sea como sonido de fondo.
PALABRAS CLAVE: Generación interactiva; valoración; consumo; televisión; telefonía celular
SUMMARY
Based on a multivariable analysis, this article analyses the consume trends, uses and
value of children and teens between 6 and 18 years old with regards to the mobile phone
screens, television and videogames in 2008 in Venezuela. Television seems to be still the
medium with highest penetrations among households. The study also found that most of
the other media consumptions activities are performed in relation with television, even if it
is just as background sound.
KEY WORDS: Interactive generation, value, consumption, television, mobile phone.
Incidencia de las pantallas del celular, el videojuego y la tv en la dinámica de la generación interactiva
venezolana
Mabel Calderín, Xavier Bringué y Charo Sádaba
112
Résumé
L’article présente une analyse multivariable des modes de consommation, usages et
valorisations propres aux enfants et aux adolescents, à propos des écrans de téléphones
portables, de télévision et des jeux vidéo pendant l’année 2008. On répond à des
questions liées à la réalité vécue à ce sujet en analysant la relation à l’écran de jeunes
vénézuéliens de 6 à 18 ans. Om remarque que les autres activités des adolescents sont
liées à la télévision qui est toujours présente ne serait-ce que comme bruit de fond.
1. Introducción
Los dispositivos tecnológicos más utilizados en Venezuela son el Teléfono
celular, la Televisión abierta y el DVD. Así lo reveló el estudio exploratorio con
carácter prospectivo, realizado por el Centro Nacional de Innovación Tecnológica
(CENIT) con la intención de “analizar la gestión de la innovación tecnológica en el
sector de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) y las Industrias de
los Contenidos Digitales (ICD) en el contexto venezolano, en el período 2008 –
2017” (2008: 1).
Los datos aportados por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel,
2010) confirman dichos resultados al señalar que en el país existen
aproximadamente 97 líneas móviles por cada 100 habitantes y el tráfico generado
por el servicio de telefonía móvil durante el IV trimestre de 2010 si se compara con
el mismo período del año anterior creció en 8,9%. Mientras que la mensajería de
texto que se genera por la vía del celular sufrió una variación de 28,9% en un año.
También se manifiesta un crecimiento del 29,9% en el último trimestre de 2010
con respecto al IV trimestre del año 2009 en el comportamiento de la mensajería
de texto enviados en la intrared sin importar la operadora de destino y de un
27,7% en los enviados hacia otras redes. Esto se traduce en que el promedio de
mensajes de texto enviados por un suscriptor de telefonía móvil es de 2,3
mensajes por cada minuto de llamada cursada (Conatel, 2010).
En cuanto a la TV, Pérez, Rodríguez, Navas y Polyecsko (1998) determinaron
que el promedio de horas diarias que dedicaban los niños entre 6 y 8 años en la
ciudad de Caracas a ver TV es de 3,8 horas, lo que se convierte en unas 26 horas
semanales, de manera que, después de las horas de sueño, ver Tv es la actividad
a la que los niños dedican más tiempo, se podría señalar esta como la principal
ocupación del niño. Así que, no es de extrañar que el Censo de Población y
TEMAS DE COMUNICACIÓN
N°22, enero-junio 2011, pp. 111-134
Universidad Católica Andrés Bello, ISSN: 0798-7803
113
Vivienda realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE, 2001 cp.
Guzman, 2006) reportara que el 86, 3 % de los hogares Venezolanos poseía
equipo de Televisión.
De acuerdo con Pérez, et al. (1998) la TV es parte del ambiente hogareño en
que se desarrolla el niño, en muchas oportunidades es la única compañía del niño,
a veces se convierte en una especie de niñera y el hábito de ver TV lo refuerzan
diariamente los adultos a través de sus propias acciones e imitaciones de la
programación televisiva.
En Venezuela los efectos y el impacto que tiene la televisión especialmente
sobre la población infantil y juvenil han sido objeto de estudio frecuente. Desde
1953 indica Bisbal (2006) que se advierte a la población sobre los peligros que
implica la exposición regular a este medio. En 1957 el Consejo Venezolano del
Niño alerta sobre el efecto que producen las radiaciones de la pantalla sobre la
visión, a lo que suman la incidencia que pueden tener los malos hábitos de los
animadores en el comportamiento de lo niños.
Le siguen trabajos como El huesped alienante de Colomina (1968), el estudio
de Santoro (1969) La televisión venezolana y la formación de estereotipos en el
niño. Y la segunda parte de esta investigación que publica el mismo Santoro
(1998) 30 años después. Barrios y García (1989) hacen la primera revisión
bibliohemerográfica sobre la TV en el país: Familia y televisión en Venezuela.
Estudio bibliohemerográfico 1953-1988. Y en 1992, Barrios publica un segundo
trabajo sobre la Familia y la TV, pero esta vez es un Estudio Etnográfico. Estudios
posteriores abordan el tema de la televiolencia (Barrios, 1996, Hernández, 1998) y
la educación para los medios (Hernández, 1991, 1997, 2001, 2002a, 2002b,
2002c, 2002d, 2004, 2005a, 2005b, 2006, 2007a, 2007b, 2007c, 2008) y Arreaza
(2006), entre otros.
Es evidente que los investigadores de la comunicación se propusieron alertar
sobre el grado de adhesión que estaba alcanzando el medio, el peso que ocupaba
en la conformación de la matriz de opinión y la diferenciación del gusto de acuerdo
con los contextos de ubicación del perceptor (Bisbal, 2006).
Sin embargo, los habitantes de las comunidades de sectores populares solo
tienen una percepción positiva hacia las TIC. Así se constata en el estudio
realizado por el CENIT (2008) donde las principales respuestas obtenidas del
cuestionario aplicado a una muestra no probabilística intencional que incluyó 153
entrevistados mayores de 18 años, de ambos sexos y residenciados en los
sectores populares de las parroquias El Valle y Catia en la ciudad de Caracas se
Incidencia de las pantallas del celular, el videojuego y la tv en la dinámica de la generación interactiva
venezolana
Mabel Calderín, Xavier Bringué y Charo Sádaba.
2. Método
La investigación realizada fue de tipo no experimental por encuesta y se
propuso describir el escenario en el que actúa la generación interactiva (GI)
venezolana a partir de un número alto de variables predictoras y confusoras para
alcanzar la potencia estadística suficiente y con ello valorar también
modificaciones de efecto relacionadas con el uso de pantallas en siete (7) países
de América Latina (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Venezuela).
Para alcanzar el objetivo de representatividad se realizó un muestreo
multietápico combinando un muestreo estratificado y por conglomerados. Ello
significó hacer una elección al azar por zonas en cada país agrupando población
escolarizada pública y privada, y de zonas urbanas y rurales; y también al azar se
eligieron colegios (unidad-conglomerado) de cada zona seleccionada por tipo de
TEMAS DE COMUNICACIÓN
N°22, enero-junio 2011, pp. 111-134
Universidad Católica Andrés Bello, ISSN: 0798-7803.
3. Referencias Bibliograficas.
Arreaza, E. (2006). Educación crítica para los medios audiovisuales. Anuario
ININCO. 18(2). 59-72.
Barrios, L. y García, G. (1989). Familia y televisión en Venezuela: estudio
bibliohemerográfico. 1953-1988. Caracas: Ministerio de la Familia.
Barrios, L. (1992). Familia y televisión. Caracas: Monte Ávila Editores.
Incidencia de las pantallas del celular, el videojuego y la tv en la dinámica de la generación interactiva
venezolana
Mabel Calderín, Xavier Bringué y Charo Sádaba
132
Bisbal, M. (2006). Recepción y televisión en Venezuela: itinerario de una línea
investigativa. Diálogos de la Comunicación, 73, 107-114.
Bringué, X. y Sádaba, C. (Coord.) (2008). La generación interactiva en
Iberoamérica. Niños y adolescentes ante las pantallas. Barcelona: Ariel.
Calderín, M. y Rojano, M. (2008). La generación interactiva como objeto de
estudio: Venezuela. En Bringué, X y Sádaba, C (2008) La generación
interactiva en Iberoamérica. Niños y adolescentes ante las pantallas.
Barcelona: Ariel. pp. 291-307.
CENIT. (2008). Proyección y prospección en TIC: estudio prospectivo sobre las
Tecnologías de Información y Comunicación y las Industrias de Contenido
Digital en Venezuela en el período 2008 – 2017 y, estudio percepción de las
Tecnologías de Información y Comunicación por parte de las comunidades.
[Disponible en línea
en: http://portal.cenit.gob.ve/cenitcms/noticia_2569_1.html. Consultado
23/11/2010]
Conatel (2010). Estadísticas del Sector Telecomunciaciones: estimaciones al
cierre del IV trimestre de 2010.
Guzmán C., C. E., (2006). Anuario Estadístico Cultural: las cifras de los medios de
comunicación en Venezuela. Carcacas: Fundación Empresas Polar.
Hernández D., G. (1997). Aprender a ver Televisión. Revista Comunicar, 8, 111-
116.
Hernández D., G. (1998).Teleniños y Televiolencias. Caracas: Universidad Central
de Veenzuela. Fondo Editorial de Humanidades.
Hernández D., G. (2001). Introducción a la teoría de la educación para los medios:
estrategia pedagógica para el sistema escolar formal. Anuario ININCO,
1(13).
Hernández D., G. (2002a). Aprender a pensar en la educación para los medios.
Anuario ININCO, 2(14), 11-53.
Hernández D., G. (2002b, oct-dic). Estrategias pedagógicas para aprender a ver
TV. Comunicación: estudios venezolanos de comunicación, 120, 80-87.
TEMAS DE COMUNICACIÓN
N°22, enero-junio 2011, pp. 111-134
Universidad Católica Andrés Bello, ISSN: 0798-7803
133
Hernández D., G. (2002c). La Televisión, madre de todas las pantallas. Agora
digital, 3. [Disponible en línea
en: http://rabida.uhu.es/dspace/handle/10272/3464. Consultado 26/11/2010]
Hernández D., G. (2002d). Teoría de la educación para los medios de Mario
Kaplún. Anuario ININCO, 2(15), 11-49.
Hernández D., G. (2004). Alcances y limitaciones de la educación para los medios
de comunicación. Ponencia presentada en el III Congreso de Imagen y
Pedagogía: Los Medios de Comunicación en el aula: de la teoría a la
práctica educativa. Ciudad de Querétano, México. [Disponible en línea en:
http://www.conimagen.dgme.sep.gob.mx/2004/doc/hernandez.pdf.
Consultado 30/04/2008]
Hernández D., G. (2005a, jul-sep). Educación en medios de comunicación en
Venezuela. Comunicación: estudios venezolanos de comunicación, 131, 7-
16.
Hernández, D., G. (2005b). ¿Por qué educar para un uso consciente de la
televisión en el sistema escolar formal en Venezuela?. Anuario ININCO,
2(17), 241-257.
Hernández D., G. (2006). Educar en Mediaciones. Anuario ININCO, 2(18), 23-56.
Hernández D., G. (2007a). Aprender a ver Televisión en la Escuela.
Comunicación: estudios venezolanos de comunicación, 138, 68-78.
Hernández D., G. (2007b). Educomunicación: desarrollo del pensamiento desde
una interdisciplina emergente. Caracas: Monte Ávila Editores.
Hernández D., G. (2007c). Seis antenas para pensar la comunicación. En Temas
de formación sociopolítica, 46. Caracas: Centro Gumilla.
Hernández D., G. (2008). Las tres “T” del a comunicación en Venezuela:
televisión, teoría y televidentes. Serie Mapas de la Comunciación, 3.
Caracas: Universidad Católica Andrés Bello.
Instituto Nacional de Estadística (2007). Alumnos matriculados en educación
básica de primero a noveno grado, por dependencia del plantel, según año
escolar, 1992/93-2006/07. [Disponible en línea
Incidencia de las pantallas del celular, el videojuego y la tv en la dinámica de la generación interactiva
venezolana
Mabel Calderín, Xavier Bringué y Charo Sádaba
134
en: http://www.ine.gov.ve/condiciones/cuadro_educacion.asp?Tt=227-
11&cuadro=Educacion_227_11&xls=22711. Consultado 11/09/2010]
Instituto Nacional de Estadística (2007). Alumnos matriculados en educación
media, diversificada y profesional, según entidad federal, 1992/93-2006/07.
[Disponible en línea
en: http://www.ine.gov.ve/condiciones/cuadro_educacion.asp?Tt=227-
16&cuadro=Educacion_227_16&xls=22716. Consultado 11/09/2010]
Kaplún, M. (1982). Lectura crítica, Caracas, Centro Guarura
Pérez L., C. L.; Rodríguez L., M. A.; Navas V., S.; Polyecsko C., M. (1998). ¿Por
qué los niños ven Televisión?: determinación de hábitos televisivos en niños
de 6 a 8 años. [Disponible en línea
en: http://cyberpediatria.com/porquetv.htm. Consultado 26/11/2010]
Santoro, E. (1969). La televisión venezolana y la formación de estereotipos en el
niño. Caracas: Ediciones de la Facultad de Humanidades y Educación de la
UCV.
Santoro, E. (1998). La televisión venezolana y la formación de estereotipos en el
niño: 30 años después. Extramuros, 8.
Soares, I. de O. (1992). Teoría y práctica de la Comunicación: Incidencia sobre los
proyectos de Educación para los Medios en América Latina», En:
Educación para la Comunicación. Manual Latinoamericano, Santiago de
Chile, CENECA/UNESCO, 273-289